Francisco comenzó a desandar el último tramo de su gira por América Latina, la segunda desde que fue ungido en Marzo de 2013.
Por Claudio Corsalini / Leandro Dario
Por Claudio Corsalini / Leandro Dario
Con su llegada a Paraguay, el papa Francisco comenzó a desandar ayer el último tramo de su gira por América Latina, la segunda desde que fue ungido en Marzo de 2013. En esa estadía, los argentinos prometen ser los protagonistas. El gobierno paraguayo estima que alrededor de un millón de compatriotas visitará Asunción, según confió aPERFIL el canciller Eladio Loizaga. “Esperamos a un millón de argentinos. Todos serán bienvenidos”, reveló.
Según datos aportados por la Dirección Nacional de Migraciones, unas 200 mil personas habían pasado hasta ayer a la medianoche por los pasos fronterizos de Clorinda –Puerto Falcón y Posadas–, Encarnación. La mayoría lo hizo cruzando en autos particulares y micros. Otros, en cambio, lo hicieron en vuelos de línea o charters.
Mónica Andrada, que pertenece a la feligresía de la comunidad San Judas Tadeo de Ituzaingó, fue una de las argentinas que viajaron para ver a Francisco. A bordo de un micro, acompañada por un contingente que partió el miércoles desde Retiro, arribó el jueves a la noche a Asunción. “Muchos argentinos van a llegar el mismo sábado para ir al Santuario de Caacupé. Es la misa que nadie quiere perderse. Con mi grupo vamos a acampar lo más cerca posible del altar. Los más jóvenes del contingente están guardándonos el lugar”, señaló, sin ocultar la ansiedad.